La evolución del sector agrícola bajo plástico tiende a realizar estructuras de invernaderos cada vez más altas y más anchas para mejorar el control de las condiciones climáticas y agronómicas.
Actualmente se están aplicando medidas de seguridad en los invernaderos, pero con la nueva tendencia se debe aumentar y mejorar dichas medidas de seguridad.
El crecimiento en el ancho de capilla de un invernadero ha aumentado desde 9,60 metros, pasando por 12,80 m, hasta llegar a los 16 metros. Con una altura a canal que oscila de 5 m a 6,5 m. Este tipo de estructuras obliga a realizar invernaderos con una carga de cultivo superior y una carga de viento más resistentes. Y también debe obligar a tener unas mayores medidas de seguridad.
Dado el incremento del riesgo en este tipo de instalaciones, es necesario contar con buenas políticas de seguridad para evitar posibles accidentes o daños mayores.
Existen peligros en la construcción de invernaderos, tales como caídas de personas o de objetos como consecuencia de la altura de trabajo que necesita la instalación de un invernadero. Y otras causas de accidentes como sobreesfuerzos, golpes o cortes. Por lo que resulta interesante promover nuevos métodos o medidas de seguridad que disminuyan la siniestralidad laboral en este tipo de instalaciones, y al mismo tiempo ayuden a mejorar el proceso de montaje del invernadero.
Desde J. Huete Greenhouses estamos comprometidos con la seguridad en el trabajo, por ello nuestro departamento de ingeniería diseña invernaderos con sistemas de seguridad preparados tanto para el montaje de este tipo de estructuras, como para el posterior mantenimiento como: cambio de plástico, limpieza de canales, encalado, etc.
J. Huete Greenhouses puede asesorar sobre la implantación de sistemas de seguridad, tanto si es un nuevo proyecto de invernadero, como si es una ampliación de un proyecto de invernadero existente.
Para más información, no dude en consultarnos.
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